jueves, 23 de julio de 2020

Capítulo 4




Cristina se siente más sola que nunca. Le suplica a Carlos que acuda a su lado. Carlos había pensando en refugiarse en su amigo pero ir con Cristina donde está el padre ingresado  no le parece.
--es que ya es muy tarde.. Mi padre se va a enojar...
Cristina le suplica:
--por favor. Estoy sola. Te necesito.
Carlos siente algo muy especial por Cristina. Es la primera vez que le pasa. Nunca anduvo en serio con una chica, nunca conoció a los padres y no sabe cómo debe comportarse. Le da pena. También le da miedo porque le parece algo demasiado oficial.   No quiere ir rápido, quiere vivir un romance bonito con la joven sin padres por el medio.
--¿Y Jorge, no está contigo?
--si pero es que...
Carlos no la deja acabar:
--Jorge  te adora, él cuida de ti. Yo no puedo venir a estas horas. Nos vemos mañana.
Cristina queda muy decepcionada:
--¡vale, muchas gracias¡
A Carlos le duele que ella se enoje. Quiere explicarse pero Cristina no le deja. Le ha colgado. Carlos se molesta consigo mismo.
--¡¡es que soy un imbécil¡
Se lleva las manos a la cabeza.
--¡¡lo que me faltaba¡
Le duele mucho que Cristina se haya enojado con él. 
--¿¿es que porque las mujeres tendrán tanta prisa siempre??
Llama a Jorge  preocupado. Se interesa por su padre y por la chica. Le cuenta lo que ha pasado. Jorge  se muestra a la defensiva:
--¡¡oye no te estarás burlando de mi hermana y por eso no quieres conocer a mi padre?¡
A Carlos le duele que Jorge  desconfíe de él:
--¡eres mi hermano. Nunca haría nada que te lastimara¡
Eso calma un poco a Jorge . Carlos se justifica:
--¡¡Yo me estoy enamorando de tu hermana pero eso no quiere decir que me tenga que casar ya¡ 
--si tienes razón. Tranquilo..Yo me ocupo de mi hermana.
Carlos se quiere desahogar, le quiere hablar de su madrastra pero Jorge  en seguida lo corta. Carlos lo entiende. Bastante tiene su amigo con el problema de su padre, En realidad Jorge  se excita demasiado al escuchar hablar de Luisa y tampoco le gusta ver como si amigo la ataca. Sin contar que se siente un traidor.  Jorge va a buscar a su hermana. Cristina ya lo esperaba frente a su moto. Llora. Está enojada. No quiere hablar a nadie.
--¡¡me quiero ir a casa¡
Jorge  es amable con ella, trata de justificar a su amigo ante su hermana pero Cristina no le deja hablar.
--¿nos podemos ir?
Jorge  le da un casco:
--te acompaño y luego vuelvo. No lo quiero dejar solo a papá.

Luisa está llorando sobre su cama. Lucas, cuando ya se ha calmado un poco. Se acerca a ella.
--lo siento soy un bruto --dice él con la cabeza agachada.
Luisa lo mira enamorada pero herida:
--Te amo Lucas y no me importa nada más que hacerte feliz a ti y a tu hijo.
Lucas se acerca a ella inseguro:
--me amas ¿en serio me amas?
Luisa se levanta de la cama. Sonríe enamorada. Lo ama profundamente. No puede estar enojada con él:
--¿y por qué crees que estoy a tu lado.
Pese a sus más de 50 años, ser un empresario de éxito Lucas ha vivido demasiados años solo y es muy inseguro de sus encantos. No entiende qué hace una chica tan joven y bonita con él:
--No lo sé... en serio no entiendo que vistes en un viudo amargado como yo.
Luisa lo besa, lo arrastra hacia ella. le quita la camisa. Le hace sentir deseado.


Carlos no hubiera querido llegar a su casa pero tal y como están las cosas con su amigo y Cristina le parece lo más prudente. Se queda en el garaje. Pasa una noche horrible pero quiere que su padre sepa que ha dormido fuera. Lucas lo despierta tirándole un cubo de agua helada encima pese a que Luisa trata que se calma. A Carlos le duele todo el cuerpo. Lucas lo golpearía si no fuera porque Luisa lo está agarrando. Carlos los mira a los dos con odio. Siente que ha perdido a su padre por culpa de Luisa a la que ve como una bruja y una aprovechada.  Su odio hacia ella,cada vez que su padre lo regaña va en aumento.
--¡algún dia me voy a ir y no me verás nunca más¡
--¡¡pues largo, por mi te largas ya¡ ¡¡ya es hora que hagas algo de provecho y no sólo el vago¡ Actúa como un hombre y no un adolescente¡
Aunque no lo dice en serio, a Lucas le desespera que su hijo le falte al respeto a su amada esposa. Carlos siente que su padre no lo quiere por culpa de Luisa, se siente que está en medio de una batalla y que ella es su enemiga.
--¡¡no le daré el gusto a la bruja de tu mujer¡
Carlos se va corriendo. Lucas quiere ir detrás de él para golpearle pero Luisa lo retiene:
--por favor, mi amor. Así no.
Lucas está molesto con su hijo y se va a la empresa molesto con su esposa por defender al joven. Luisa está desesperada por un hogar inestable, porque amando a Lucas no ha logrado que su hijo la acepte. Le duele que la relación entre padre e hijo está perdida por su culpa. Llaman al timbre. Es Jorge , con la excusa de ir a ver a Carlos ha pasado a ver a Luisa. Se le acerca con unas flores:
--¿¿que esto? --dice la chica sorprendida por el detalle.
Jorge  la mira con timidez:
--unas flores para que me disculpes.
Luisa no acepta las flores.
--¡¡mira chico tengo muchos problemas¡
Lo deja con las flores y muy triste. No sabe qué hacer con las flores así que entra en la habitación de su amigo que está en la ducha.
--te traje unas flores.
Carlos hace voz afeminada:
--gracias, mi amor. No eres mi tipo.
Luego se ríe. Jorge  está algo triste pero hace un esfuerzo para que su amigo no se dé cuenta.  
--Son para que se las des a mi hermana... está algo enojada contigo.
Carlos sale de la ducha totalmente desnudo:
--¡¡gracias por el detalle¡ ¿y está muy enojada?
--Bastante.
A Carlos le preocupa que se estropee el inicio de su romance con Cristina pero le tranquiliza tener la complicidad de su amigo. Jorge  y Carlos hablan de sus cosas, de su música, de los ensayos mientras que Carlos se viste. Bajan juntos. Se van por la cocina porque Carlos no quiere encontrarse con la que llama bruja. El corazón de Jorge  late con fuerza al pensar en Luisa y la busca con la mirada sin suerte. Jorge  lleva su auto. Van a su casa a buscar a Cristina. Carlos sale del auto y la espera con las flores. A la joven le emociona pero se hace la dura:
--¡¡no te pienso perdonar tan fácilmente¡
Carlos se queda triste. Jorge  le guiña el ojo a su amigo. Le pone la mano sobre el hombro. Lo mira con complicidad. Conoce a su hermana, con la mirada lo tranquiliza. Luego van a buscar a Marta .  Los dos amigos están delante y las chicas atrás.  Carlos se quiere despedir de su amada con un beso pero ella se muestra enojada aunque está derretida por él. Baja con sus flores. Carlos se queda triste. Jorge  le pone la mano en el muslo a su amigo muy fraternal:
--se hace la dificil pero te ama, esta tarde te perdona.

Marta  y Cristina esperan a los chicos  en el patio de la escuela.
--¿no tardan mucho??qué hora es?
--¡¡la misma que hace 30 segundos cuando me lo preguntaste por última vez¡
Pero es que Cristina tiene tantas ganas de ver a su amado que los segundos le parecen minutos.  LLegan el auto de Jorge .
--¡por fin¡ ¡¡por fin¡
Cristina se acerca corriendo. Nada más frenar entra y se tira encima de Carlos.
--¡¡te amo te amo¡
a Jorge  le incomoda un poco lo apasionada que es su hermana con su amigo pero no dice nada. Marta  se muestra coqueta con él y él tiene prisa en desahogarse. 
--¡par de tortolitos, atrás que nos vamos¡ --Jorge .
Carlos está sorprendido por el cambio de su amada pero encantado. En los asientos de detrás no hacen más que besarse. Jorge  tose para que se comporten. Carlos y Cristina se miran tímidos. Él se quiere explicar pero ella no le deja.
--lo más importante es que te amo..No me importa nada más. Te daré el tiempo que necesitas para que conozcas a mis padres.
Carlos la acaricia. Se muestra muy dulce. Muy cariñoso.
--te juro que es la primera vez que siento algo como esto.
Cristina está feliz. Le pone la mano en la mejilla y le dice:
--eso es lo único que cuenta.
A Carlos le da pena por su amigo pero Cristina lo besa y él está demasiado enamorado como para rechazarla. Jorge  iba a protestar pero Marta  le mete la mano en la entrepierna.
Jorge  frena de golpe:
--¡¡estás loca¡ ¿¿quieres que tengamos un accidente?
Marta  se muestra excitada:
--es que no puedo estar sin ti. Te necesito. Quiero que cojamos ahora.
Jorge  traga saliva. Le excita mucho la propuesta de la joven. Es lo que necesita en ese momento. Están frente a un parque.
--venga tortolitos a dar un paseo. Os irá bien para enfriaros. 
Aunque Jorge  lo que quiere es sacárselos de encima, a la pareja de enamorados les parece una genial idea  porque quieren pasear tomados de la mano, besarse sin la mirada indiscreta de Jorge . Éste mira a Marta  como un animal salvaje, aparca el auto en un lugar discreto y ahí se lanza sobre ella. Marta  se deja hacer todo lo que él quiere Ahora que ya se ha desahogado, Jorge  toca el claxon:
--¡¡venga, tortolitos¡
Carlos y Cristina se han quedado a la vista disfrutando de su amor. No quieren que nadie vaya a pensar lo que no es.   Ahora que ya ha descargado, Jorge  tiene prisa en dejar a Marta . Los amantes ni se miran. En cambio Carlos y Cristina no dejan de acariciarse y susurrarse palabras de amor.  Jorge  tiene prisa por llegar a la casa de su amigo con la esperanza de ver a su Luisa. De hecho le pide a su amigo que lo deje ir al baño.
--¡¡es que no aguanto más¡
Mientras Cristina y Carlos disfrutan de su amor en el garaje. Entre besos y caricias él le canta y le toca una canción con la guitarra de Jorge . Éste atrasa todo lo que puede su estancia en la casa pero se va vencido. No hay rastro de Luisa  y no se atreve a preguntarle a Carlos. Le da horror que alguien se pueda enterar de ese secreto suyo. Cristina y Carlos se despiden con un largo beso. Jorge  no los detiene porque lo que más quiere es quedarse en esa casa. Es Carlos el, que por respeto a su amigo, se aparta de Cristina. Se despide de su amigo con un  abraza. Y Jorge  se tiene que ir con tristeza.  Los hermanos dejan a Marta  y luego van a comer para después visitar a su padre en el hospital. Ahí está ya la madre. Manuela  trata a sus hijos con mucho cariño. Cristina la mira con adoración.  Jorge  le reprocha:
--¿donde dormiste?
Manuela  ya lo tiene ensayado:
--en el hospital ¿donde más?
Cristina mira a su hermano como diciendo:
--¡¡ves como si lo ama¡
Jorge  mira con tristeza a su hermana. No la quiere desengañar. No se quiere enfrentar a su madre. Decirle que estuvo un buen rato y  nunca la vio.

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